Con cinco sudamericanos entre los once titulares, el PSG abrió la cuarta fecha de la Ligue 1 ante el Saint-Etienne, un duro equipo que llegó al Parque de los Príncipes con la cosecha s de tres victorias consecutivas y la valla invicta. Naturalmente, todas las miradas se posaron en la figura estelar de la noche parisina: Neymar; aunque también hubo un seguimiento particular para los argentinos Ángel Di María y Javier Pastore, junto al uruguayo Edinson Cavani y el otro brasileño Marquinhos.
La resistencia de la visita duró 20 minutos, dado que un penal facturado por el artillero charrúa dejó sin posibilidades a Stéphane Ruffier para que los aficionados locales comiencen a saborear la punta del campeonato.
En el complemento el PSG estiró la ventaja a través de una pelota parada. Las limitaciones defensivas de la visita facilitaron el trabajo de Thiago Motta, quien capitalizó la asistencia de pecho de Marquinhos para festejar el 2 a 0 y liquidar el pleito.
La victoria del elenco de Unai Emery nunca estuvo en riesgo. Sobre todo por las soberbias intervenciones de Alphonse Areola, quien se lució con dos tapadas magnificas que evitaron el descuento.
Con el lujo de Cavani en el final, el dueño de casa selló la goleada para que el combinado capitalino se garantice los tres puntos y establezca una cosecha de 4 triunfos en igual cantidad de presentaciones. El único participante que podrá alcanzar la suma de 12 unidades en las clasificaciones es el Mónaco, que el domingo recibe al Olympique de Marsella. Todo indica que el título volverá a disputarse entre los mismos que pelearon la temporada pasada, aunque en este caso el PSG cuenta con el as de espadas que hoy pasó desapercibido.
Fuente: infobae.com
