LIGUE 1: El Saint-Étienne de Óscar, nueva era

El AS Saint-Étienne, ha otorgado las riendas de su nuevo proyecto deportivo al entrenador catalán Óscar García, de 44 años, que viene de conseguir dos dobletes consecutivos en Austria con el Red Bull Salzburg. Siguiendo el camino que antes emprendieron Mónaco (Jardim), PSG (Emery), Nice (Favre), Lille (Bielsa) y Nantes (Ranieri), les Verts se han sumado a la moda de fichar entrenadores extranjeros que parece imperar últimamente en la liga francesa, un campeonato tradicionalmente poco abierto a metodologías e influencias foráneas. García llega, no obstante, como segunda opción, pues antes Patrick Vieira había rechazado el puesto, y sucede en el cargo a Christophe Galtier, entrenador durante las últimas ocho campañas y que decidió poner fin a su ciclo de forma voluntaria al término del pasado ejercicio.

Saint-Étienne es una plaza fuerte del campeonato francés. Lo es por palmarés y afición. Aunque al aficionado txuri-urdin pueda sorprenderle este dato, les Verts son, con diez títulos, el club con más ligas de Francia, muy por delante, por ejemplo, del PSG, que de momento cuenta con seis. Hay que remontarse, eso sí, hasta la temporada 1980-81 para encontrar al último Saint-Étienne campeón. Un tal Platini era la estrella de aquel equipo.

Pero la época dorada del club se vivió en los años 70, antes de la llegada del que después sería triple ganador del Balón de Oro. Claro dominador en Francia, con 4 ligas y 4 copas conseguidas en esa década, los stéphanois estuvieron cerca de coronarse también a nivel continental, llegando a las semifinales de la Copa de Europa en 1975 y cayendo por la mínima en la final en 1976 ante el Bayern de Beckenbauer. Aquellos éxitos del equipo pusieron a la industrial ciudad de Saint-Étienne en el mapa y forjaron entre su población una fuerte afición futbolera. Allí el fútbol se vive con pasión, y eso no es algo que suceda en toda Francia. Su hinchada es, junto a la de Marsella, la mejor del país galo.

SIN UN OBJETIVO CLARO Lejanos ya los tiempos en los que la aspiración era el título, el equipo ha finalizado entre la cuarta y la octava plaza en las seis últimas temporadas pero sin tener nunca un proyecto ni unos objetivos claros. En la última temporada el equipo terminó octavo y cayó en dieciseisavos de final de la Europa League ante el Manchester United. En una campaña insulsa, la única alegría para la afición fue la victoria conseguida en el derbi ante el Olympique de Lyon (2-0).

A pesar de ello, la marcha de Galtier cogió por sorpresa al club, que sin planificación previa alguna tardó más de un mes en anunciar a su nuevo técnico. Esta falta de ideas contrasta con los ambiciosos proyectos que se están gestando en otros equipos como Marsella o Lille, que se suman a los del PSG, Mónaco, Niza y Lyon, por lo que no le será fácil encontrar su sitio en la parte alta del campeonato, por la que también pelearán otros equipos como el Girondins y el Nantes. “El objetivo es ser mejores cada día, de momento vamos a empezar por eso”, respondió García preguntado al respecto el día de su presentación. “El objetivo principal es construir algo que deje huella, que se vea que hemos pasado por Saint-Étienne”, añadía hace unos días en una entrevista concedida a L’Équipe.

En lo tocante a la configuración de la nueva plantilla, las cosas marchan despacio. García ha descartado a siete jugadores y ha perdido a dos con los que contaba: Malcuit (Lille) y Veretout (Aston Villa). Continúa en el equipo el portero de Baiona Stéphane Ruffier, indiscutible desde su llegada hace ya siete temporadas. En cuanto al capítulo de fichajes, hasta el momento solo se han producido dos, el del lateral derecho suizo Janko (Celtic de Glasgow) y el del delantero centro Diony, natural de Mont-de-Marsan (Landas) y autor de once goles la temporada pasada con el Dijon. La idea del técnico es incorporar todavía a cuatro jugadores más: un central, un lateral izquierdo, un pivote y un mediapunta.

ESTILO DE JUEGO Y PREPARACIÓN “Me gusta jugar muy ofensivo, me siento incómodo si mi equipo no tiene el balón y quiero que mis jugadores piensen así, queremos recuperar el balón muy rápido, queremos estar lo más cerca posible de la portería contraria”, explicaba sobre su filosofía de juego el nuevo entrenador el día de su presentación.

El equipo comenzó sus entrenamientos el pasado 26 de junio, doce días antes que la Real, y de momento las sensaciones que está dejando son buenas. Ya ha disputado dos encuentros amistosos y ha vencido de forma clara en ambos: 0-2 frente al Ajaccio, de Ligue 2, y 0-4 frente al Dijon, de Ligue 1. Tras el encuentro de hoy en Biarritz todavía disputará dos partidos de preparación más antes de iniciar la competición liguera el próximo 5 de agosto recibiendo al Niza.

El conjunto que hoy se mide a la Real en Biarritz se ha reforzado este verano con dos jugadores: el lateral Janko y el delantero Diony.

Fuente: noticiasdegipuzkoa.com