Paul Pogba, de 32 años, está decidido a aprovechar la segunda oportunidad que le ofrece el fútbol, y no cuenten con que el centrocampista francés destaque en el AS Mónaco. Como explica el director general Thiago Scuro, el exjugador de la Juventus ya tiene todas las cualidades para ser un empleado y compañero modelo.
«Antes de ser una superestrella, como dicen, es una buena persona, y eso es lo que importa. No se trata de ser una superestrella; eso es para el mundo exterior, para las redes sociales. En el fondo, es una buena persona, muy amable con todos, que respeta a todos los empleados, que dedica su tiempo y atención a los demás jugadores, que intenta compartir sus conocimientos y experiencia. Es fantástico ver que estos jugadores, superestrellas, son buenas personas a diario y muestran mucha solidaridad para ayudar a los jóvenes a crecer», declaró el entrenador del Mónaco a L’Équipe.