Libre desde su salida del Girondins de Bordeaux el 30 de junio, Hatem Ben Arfa no tiene escasez de solicitudes. Tras ser abordado por Sivasspor y Kayserispor, dos clubes turcos de la Süper Lig, y despertado cierto interés en España y China, el internacional francés (34 años, 15 partidos internacionales) ha sido objeto durante varias semanas de una oferta en particular del Esperance de Túnez.
El club, vigente campeón tunecino y clasificado para la Champions 2021-2022, competición que ha ganado cuatro veces (1994, 2011, 2018 y 2019), desea fichar al centrocampista ofensivo de origen tunecino.
El club norteafricano, presidido por el empresario Hamdi Meddeb, que está al frente del grupo alimentario Délice, cotizado en la Bolsa de Valores de Túnez, tiene una superficie financiera inigualable en Túnez y es incluso uno de los más ricos del continente.
Pero el “Sang et Or”, que tendrá que asumir el sueldo (en torno a los 40.000 euros al mes) del delantero senegalés Moussa Konaté (28) cedido por el Dijon (Ligue 2) con opción a compra, duda ante las reclamaciones de sueldos del exjugador del Lyon, OM y PSG.
Según fuentes del interior del Esperance, Ben Arfa, que ganaba 120.000 euros al mes, está dispuesto a hacer concesiones económicas. Pero le gustaría recibir entre 800.000 y 900.000 euros al año, o un poco más de 66.000 euros al mes.
El Club nunca le ha pagado un salario así a un jugador, y las discusiones aún continúan este miércoles entre los líderes tunecinos y el ex del Bordeaux. Sin embargo, no podrán continuar eternamente, ya que la ventana de transferencia local cierra este miércoles a la medianoche.
Fuente: futbolfrances.com
