Durante la 3ª jornada de la Europa League, el FC Nantes perdió ante el Friburgo (2-0) este jueves. Un resultado lógico dada la impotencia del Nantes.
Marcados sin duda por su catastrófico arranque en Mónaco (derrota por 4-1) el domingo, los Canarios ha tenido un inicio de partido muy cauteloso. Tal vez incluso demasiado. Los hombres de Antoine Kombouaré se contentaron sobre todo con permanecer en su sitio ante un rival incapaz de llevarse un empate al final del partdo.
Ante un disparo de Kyereh desviado por Pallois, el portero Lafont no se mostró preocupado en los primeros minutos. No más que su homólogo Flekken, apenas alertado por un centro de Blas, tampoco tuvo que trabajar en el arranque del compromiso europeo. Por lo tanto, esperábamos una reacción de Nantes al pasar los minutos.
Pero fue más bien el Friburgo el que volvió con mejores intenciones para la segunda parte. Los alemanes rápidamente abrieron el marcador gracias a Kyereh (1-0, 48º) tras un desliz de Chirivella. Fue el inicio de un segundo acto completamente diferente ya que el colíder de la Bundesliga fue ganando confianza.
Las situaciones se acumulaban en la jaula de Lafont, que lógicamente recibiría el segundo gol firmado por Grifo (2-0, 72º). Inofensivos, los nanteses esperaron el final del partido para finalmente reaccionar.
Pero Guessand, solo contra el portero Flekken, y Moutoussamy con un cabezazo desde corta distancia desperdiciaron dos grandes oportunidades para meterse en el juego. Hay que reconocer que Nantes no merecía nada más que esta segunda derrota en tres partidos en esta fase de grupos de la Europa League.
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