Adrien Rabiot está el centro de la polémica. Mientras que la Juventus de Turín empató (1-1) anoche en el partido de ida por los octavos de final sobre el césped del Villarreal, con una anotación exprés de su fichaje Dusan Vlahovic a los 31 segundos, parece que el centrocampista internacional francés se llevó todas las tapas periodísticas y está en el corazón de la controversia.
Rabiot obviamente debería haber sido expulsados por el árbitro M.Siebert después de una falta muy desagradable sobre Samu. Amonestado por una amarilla, normalmente debió haber tenido una tarjeta roja dada la violencia del choque, hechos que han sacudido a la prensa en toda España.
El ex centrocampista del PSG golpeó al lateral nigeriano adelantando su zurda a la altura de la rodilla, lo que pudo ser muy peligroso para el jugador del Villarreal.
El colegiado no creyó oportuno revisar la acción y por ello se quedó en amarilla la acción de Rabiot. Mientras que el VAR tampoco llamó al colegiado para revisar la falta cometida, la polémica al otro lado de los Pirineos es abismal.
«La roja es clara. ¡Un poco más y se rompe la rodilla! No entendí la decisión», había declarado el presidente del Submarino Amarillo, Fernado Roig tras el partido.
Baste decir que es probable que Rabiot suscite críticas en los próximos días y será cuestionado de cerca en el partido de vuelta.
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