El fichaje por Leroy Sané por el Bayern de Munich parece ya un hecho, a pesar de que no hay acuerdo con el Manchester City, que desea retener al alemán.
Tanto es así que varios directivos e incluso el entrenador Hansi Flick han hablado sobre su posible llegada. El último en hacerlo a sido Kingsley Coman quien, a pesar de que Sané juega en su misma posición, abrió las puertas del club a su llegada afirmando que para él no sería un problema.
“Cuando llegué al Bayern estaban Frank Ribéry, Arjen Robben y Douglas Costa. No fue un problema para mí. Es mejor para el equipo si hay muchos jugadores de este nivel. Si viniera Sané no sería un problema. A menos que el club me diga que ya no me necesitan, pero no sentí que fuera así”, explicó Coman, titular indiscutible esta temporada en el conjunto bávaro, a SportBild.
El galo termina contrato en 2023 y, de momento, no tiene prisa por firmar un nuevo contrato. “Quiero terminar la temporada. Luego veremos si mi situación ha cambiado en el club. Tomaré las decisiones correctas en ese momento”, advirtió Coman.
Fuente: mundodeportivo.com
