Antes de pitar un penalti indiscutible por una patada de Konstantínos Mavropános en la cara de Antoine Griezmann, el árbitro Mateu Lahoz se negó a sancionar varias faltas que parecían más que merecedoras de un penalti a favor de la selección francesa este lunes contra Grecia (1-0) en la fase de clasificación para la Eurocopa 2024.
Tras el partido, el seleccionador francés, Didier Deschamps, se burló del colegiado español, que arbitraba el último partido de su carrera.
«¿Decisiones arbitrales aleatorias? Sí, es una bonita palabra. Como saben, era el último partido del señor Lahoz, un personaje del arbitraje. Tengo la impresión de que el VAR no quiso anularle, y he visto penaltis pitados por mucho menos que eso», declaró a TF1.
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