Además de los tocados en la defensa y las sanciones que merman el centro del campo, el Barça también está pendiente de la evolución de sus delanteros franceses Antoine Griezmann y Ousmane Dembélé. Ambos siguen su curso con una perspectiva plausible en cada caso: para el primero es llegar al partido ante el Nápoles y para el segundo, a los cuartos de final de la Champions League si hay clasificación.
Griezmann, relevado en el descanso del Valladolid-Barça, se perdió los últimos partidos de Liga a causa de una lesión en el cuádriceps de la pierna derecha, pero trabaja día a día para estar a punto en el encuentro más importante de la temporada. Pinta bien.
Dembélé enfila el sprint final de la recuperación de la operación que, en febrero, suturó el tendón proximal del bíceps femoral de su pierna derecha. Se habló de seis meses de baja y el Barça-Nápoles sería días antes de ese pronóstico. Ante su historial de lesiones es más prudente pensar en unos hipotéticos cuartos si los hay.
Dembélé enfila el sprint final de la recuperación de la operación que, en febrero, suturó el tendón proximal del bíceps femoral de su pierna derecha. Se habló de seis meses de baja y el Barça-Nápoles sería días antes de ese pronóstico. Ante su historial de lesiones es más prudente pensar en unos hipotéticos cuartos si los hay.
Fuente: sport.es
