FUTBOL FEMENINO: Irene Paredes habla del entorno del PSG

La Real Federación Española de Fútbol (RFEF) ha puesto en marcha una iniciativa para acercar el fútbol femenino histórico al actual a través sus protagonistas, y este miércoles reunió a la primera capitana de la selección, Inmaculada Castañón, con la de la actual, Irene Paredes. Además, la jugadora del PSG habló sobre la situación del club: «Estamos en una especie de ERTE».

La primera vez que portaron el brazalete del equipo español, las responsabilidades y exigencias que esto conlleva, el partido más importante en su etapa como internacionales o las diferencias abismales entre aquel fútbol y el actual fueron algunos de los aspectos sobre los que giró la conversación interactiva entre las dos figuras del fútbol femenino español Inmaculada Castañón e Irene Paredes.

Inma Castañón se convirtió en la primera capitana de la historia de la Selección Española en 1983, año de nacimiento del combinado femenino. En su carrera defendió la camiseta nacional en 22 ocasiones y recuerda «como algo muy especial» el primer partido oficial, disputado el 5 de febrero de 1983 ante Portugal.

«No lo puedo describir con palabras. Sentir el himno hizo que se me pusiese la piel de gallina, era algo que quería vivir y lo estaba viviendo», rememoró de aquel partido en el Estadio del Tecla en La Guardia (Pontevedra).

«El fútbol femenino era completamente diferente a como es ahora. Era el cielo y la tierra. Por eso siento envidia sana de lo que están viviendo ellas», reconoció Inma, a la que le gustaría poder revivirlo, sobre todo, con las ventajas que tiene ahora.

«Nosotras no entrenábamos, jugábamos solamente la ‘pachanga’, no teníamos preparadores, e incluso había equipos que no tenían ni botas ni campos. Son 40 años de diferencia y gracias a Dios eso cambió», explicó.

Por su parte, la actual capitana del combinado español y del París Saint-Germain, Irene Paredes, se refirió al hecho de llevar al brazalete nacional como «una responsabilidad» que, no obstante, ostenta sin ningún problema al haber contado antes con experiencia en la selección y encontrarse «rodeada de compañeras muy agradables».

Un importante cargo que la defensa olvida en el momento en el que el balón echa a rodar. «Cuando empieza el partido el brazalete pasa a ser algo secundario, te centras en jugar», dijo Paredes, consciente de que una de sus funciones como capitana es ser «el brazo derecho de Jorge Vilda», junto a otras tres compañeras (Amanda Sampedro, Jennifer Hermoso y Virginia Torrecilla), y servir de nexo de comunicación entre el seleccionador y las jugadoras.

Fuente: besoccer.com