Aprovechando unos días de descanso concedidos por el técnico del Paris Saint-Germain, Christophe Galtier, el delantero Lionel Messi (35 años, 27 partidos y 15 goles en L1 esta temporada) viajó este fin de semana a Cataluña. Si el motivo de esta visita era sobre todo personal y familiar, inevitablemente ésta no hace más que avivar los rumores sobre un regreso del Pulga, al finalizar contrato en junio, al FC Barcelona.
Al respecto, el diario Mundo Deportivo desvela que el argentino aprovechó su presencia en España para cenar con sus excompañeros blaugranas Jordi Alba (34 años, 19 partidos y 1 gol en LaLiga esta temporada) y Sergio Busquets (34 años), 25 partidos de Liga esta temporada). E inevitablemente, la cuestión de su futuro habría estado en el menú…
Mientras el lateral izquierdo ha perdido su puesto de titular y el centrocampista está llegando al final de su contrato, los medios entienden que la suerte de los tres hombres bien podría estar ligada. Es decir, para promover el regreso del campeón del mundo de 2022, el Barça puede tener que mimar a los dos españoles, con un futuro incierto…
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