El 20 de agosto de 2023 en Sídney, mientras las jugadoras de la selección española acababan de ganar la final del Mundial contra Inglaterra, Luis Rubiales, entonces presidente de la Federación Nacional, provocó la indignación general al besar a Jennifer Hermoso, que se vio obligada a abandonar la ceremonia de entrega de medallas.
La jugadora de 34 años presentó una denuncia unos días después, el 6 de septiembre de 2023, denunciando también las presiones ejercidas sobre ella para sofocar el escándalo a través de su familia y amigos, con el objetivo de llevarla a justificarse y denunciar públicamente a Luis Rubiales quien le había dado contra su voluntad.
El juicio se ha abierto este lunes por la mañana en el juzgado de San Fernando de Henares, al este de Madrid. La Fiscalía pide dos años y medio de prisión para Rubiales, un año por agresión sexual y un año y medio por las presiones ejercidas al jugador.
Pero Luis Rubiales tiene la «conciencia tranquila», dice el diario LEQUIPE en su edición de hoy.
En sus primeras declaraciones, la jugadora, que se ha convertido en un símbolo de la lucha contra el machismo en el deporte, denunció lo sucedido. Un beso como el que le impuso el exjefe de la Federación Española de Fútbol Luis Rubiales «no debería ocurrir jamás, en ningún sector social ni profesional», afirmó.
