En este delicado período de epidemia originado por el Covid-19, que ha provocado insertar a una población a vivir en cuarentena en la mayoría de los países europeos, la actividad de los agentes se está desacelerando.
Entre la imposibilidad de supervisar o viajar y la dificultad del escrutinio diario de los avatares del oficio, Johan Caurant, quien tiene licencia por la FFF para ejercer el oficio, trata de organizarse lo mejor posible ante el caos que se vive en el fútbol.
«La primera consecuencia es la ausencia de reuniones. Esto generalmente corresponde al 60 o 70% de nuestra actividad. Luego está el trabajo con el jugador, con quien se pondera en muchas ocasiones. Debemos proporcionarle respuestas. También debemos estar muy atento a la salud mental de los atletas”, apuntó Caurant en una entrevista concedida al diario “L’Équipe”.
“Un atleta tiene un alto gasto de energía, tiene su programa, pero eso puede no ser suficiente y jugar con su propia psicología, en especialmente con los jugadores jóvenes”, puntualizó el agente.
“Es importante que se sienten apoyados. Tener una llamada telefónica le permite al jugador conseguir un impulso. De lo contrario, pueden surgir períodos de pereza, también depende de nosotros darles pequeños objetivos a diario”, dijo Johan Caurant para el rotativo “L’Équipe”.
Fuente: futbolfrances.com
