Pau López está cada vez más realizado en el lado del Olympique de Marsella donde sigue ganando confianza.
Aunque el guardameta español todavía no se considera el número 1 frente a Steve Mandanda, parece ser el principal portero de Jorge Sampaoli con muchas titularidades partido tras partido.
Pero si bien su situación en el OM es muy positiva, el portero repasó su vida en el AS Roma, donde aterrizó cedido el pasado verano antes de ser adquirido definitivamente por el Marsella.
“Venía de un lugar donde era muy feliz, en el Betis. Iba a un club grande, el salario era bueno, pero no me adapté bien. Había perdido esa alegría, esas ganas, mi rendimiento estaba bajo. No fue el club, ni los compañeros ni el entrenador, pero vino de mí», aseguró primero López.
Confiado en que no se cumplió en Italia, tuvo la suerte de tener el reto del Marsella y eso cambió todo para él, según recuerda.
«Por suerte llegó Pablo (Longoria) con este proyecto y encontré esta alegría nuevamente. No es porque tengamos dinero y tiempo libre que necesariamente seamos felices», declaró, mostrando que la felicidad no rima con el dinero y que el placer de estar del lado del OM donde ahora es genial.
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