El Girondins de Bordeaux anunció en el día de ayer al personal administrativo el establecimiento de un plan de salida voluntaria. En un correo electrónico que el rotativo “Sud Ouest” pudo verificar, la dirección de Bordeaux evoca un «acuerdo colectivo de ruptura convencional» cuyo objetivo es «continuar la alineación de la organización con la estrategia de la empresa, reduciendo las complejidades internas».
El club continúa desarrollando nuevos métodos de trabajo más ágiles y adaptados a la evolución y necesidades del club.
Este plan de «despidos ilimitados» podría afectar a una treintena de puestos de trabajo, principalmente en los servicios administrativos y comerciales de unos 300 empleados en total.
Su objetivo es reducir la nómina del club de Aquitania, que tiene una deuda de 40 millones de euros con el fondo de inversión Fortress, y lograr el equilibrio financiero en tres años.
Fuente: futbolfrances.com
