Stade Rennais ganó al final de un partido muy emocionante. Enganchado desde hace tiempo, el club bretón se impuso por fin sobre la cuerda floja al Dynamo de Kyiv (2-1) este jueves con motivo de la 3.ª jornada de la Europa League.
En un hermoso ambiente en Roazhon Park, los Rennais se proyectaron rápido, pero a Gouiri y Majer les faltó precisión en la definición. Incapaces de librarse de la presión bretona, los ucranianos sufrieron los debates y Boyko tuvo que intervenir en un tiro lejano de Bourigeaud. Pese a las buenas rachas colectivas, a los de Bruno Génésio les costó conseguir este dominio por una auténtica imprecisión en la zona de la verdad.
Pero a fuerza de empujar, el Rennes encontró el marco con un soberbio tiro cruzado de Terrier sobre un desfase de Gouiri (1-0, 22º). Pero después de esta primera anotación, los bretones dejaron de jugar y fueron castigados de inmediato con el empate en dos tiempos de Tsygankov (1-1, 33). Privado de balón, el club francés luchó seriamente para volver al partido hasta el descanso.
Cuando volvieron del vestuario, el Rennais volvió con mejores intenciones al encontrar por fin agresividad en los duelos. A pesar de la gran presión ejercida en el campo contrario, los galos lucharon para preocupar realmente a Boyko con un gran desperdicio a nivel técnico.
Empujados por el público, los bretones intentaron sentenciar el compromiso, pero sólo dejaron brillar a Boyko en los tiros lejanos… Incluso acorraladas, las tropas de Mircea Lucescu demostraron un enorme coraje para hacer retroceder las olas de Rennes.
Mientras los dos equipos se dirigían al empate, Doué, muy activo desde su entrada, aprovechó un gran error de Popov para dar la victoria al Rennes en los últimos instantes (2-1, 89º).
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