Totalmente dominado, el Olympique de Marsella lógicamente cayó sobre el césped del Villarreal (3-1) este jueves, durante el partido de vuelta de los octavos de final de la Europa League.
Gracias a su gran éxito en el partido de ida (4-0), el club marsellés logró validar su billete para la siguiente ronda.
Con un esquema más defensivo y sin Aubameyang, los marselleses podían esperar sufrir y eso fue precisamente lo que ocurrió.
Rápidamente bajo presión después de una gran oportunidad de Sørloth, los visitantes tuvieron grandes dificultades para sacar el balón.
Todo lo contrario que el submarino amarillo, que sigue igual de amenazador a través del delantero noruego. Incluso fue necesaria una parada refleja de López para evitar un error de Clauss tras un despeje sobre Coquelin.
Tras 25 minutos de sufrimiento, los focenses respiraron más tranquilos y consiguieron acercarse con mayor facilidad al área contraria.
Ligera mejora antes de la sanción, gracias al cabezazo de Capoue, que aprovechó un marcaje demasiado laxo de Ounahi para abrir el marcador (1-0, 32). En gran forma, el centrocampista francés planteó grandes problemas a los olímpicos, felices de verlo fallar su zurdazo disparando cerca del poste.
Al regresar del vestuario, Jean-Louis Gasset lanzó a Harit y Aubameyang. El marroquí inmediatamente puso un caviar al gabonés pero éste perdió inexplicablemente la compostura a la hora de concluir.
Sørloth fue mucho más preciso al castigar a López tras un preciso servicio de Guedes (2-0, 54). En el 2-0, al Marsella le empezaron a temblar las piernas, a diferencia de la mano del portero español, decisivo en un cabezazo de Moreno para evitar el 3-0.
En el último cuarto de hora, los marselleses jugaron más alto y repelieron con mayor facilidad los ataques españoles menos regulares. Pero fue a balón parado donde se dejó engañar por Mosquera, que marcó de cabeza tras una ofrenda de Baena (3-0, 85).
Tras un final insoportable y tras dos paradas de López, Clauss enfrió definitivamente al público de La Cerámica tras una magnífica fiesta de Aubameyang (3-1, 90+5).
¡Se evitó la remontada!
