Su arrebato de furia a comienzos de febrero le va a tener casi un año sin competir. Aquel 1 de febrero de 2020 no lo olvidará fácilmente. No se beneficiará del parón, y tendrá que cumplir su sanción de seis meses de forma íntegra.
Gelson Martins probablemente vaya a cumplir la sanción más larga de la historia del fútbol. Su empujón al colegiado del Nimes-Mónaco le costó seis meses sin jugar, los cuales se convertirán en casi un año por culpa del parón.
Cuando parecía que mejor estaba, perdió los papeles y cavó su propia tumba (futbolística). Gelson empujó al árbitro y la LFP le castigó de forma ejemplar con seis meses alejado de los terrenos de juego.
Había cumplido menos de mes y medio cuando el coronavirus hizo acto de aparición en Francia. La Ligue 1 se suspendió, primero de forma temporal y luego definitiva. Gelson y el Mónaco esperaban que el tiempo sin fútbol computase para su sanción, pero no será así.
Un comunicado oficial de la Federación Francesa ha acabado con toda esperanza al respecto. El tiempo sin fútbol por el coronavirus no computará de cara a las sanciones.
«El periodo comprendido entre el 13 de marzo de 2020 y el 30 de junio de 2020 no se incluirá en ninguna suspensión de tiempo. Por lo tanto, para dicha suspensión, la cuenta comenzará el 1 de julio de 2020«, escribió la FFF.
Por tanto, la cuenta atrás para el retorno de Gelson Martins comenzará a partir del 1 de julio. Lleva, por tanto, solo cinco semanas de las treinta que debe cumplir. Se espera que pueda volver en noviembre.
Su momento de furia le ha costado mucho más caro de lo que jamás hubiera imaginado, y el coronavirus ha convertido una durísima sanción de seis meses en una pena de diez.
Fuente: besoccer.com
