Después de momentos complicados en el Bayern de Múnich y un tiempo de juego no tan malo (22 apariciones en todas las competiciones, incluidas 4 en la Liga de Campeones) en una posición muy competitiva, Tanguy Kouassi Nianzou tuvo que enfrentar los hechos para finalmente dejar un club al que se había unido no sin ambición dos años antes.
Una experiencia en Baviera de la que aseguró no arrepentirse al poco de su llegada a España. “No me arrepiento, no. Como todo futbolista, me decepcionó, porque queremos jugarlo todo. Pero forjó una mentalidad en mí y hoy estoy lista para cualquier situación. El Bayern me hizo crecer. Mentalmente me ayudó a decirme: “O.K. nada se adquiere””
Comprado por 20 millones de euros el pasado verano por el Sevilla FC, el ex parisino no tuvo el comienzo más fácil. El club español, lastrado por una situación deportiva catastrófica, no parecía ser el trampolín esperado y el 14 sevillano intentó dar un buen espectáculo. Hará falta la salida de Jorge Sampaoli en favor de José Luis Mendilibar para ver una formación sevillana mucho más llamativa.
Una dinámica que también beneficia a los jugadores, empezando por Loïc Badé, Youssef En-Nesyri, Pape Gueye o Lucas Ocampos. Por su parte, Tanguy Kouassi Nianzou, que se encuentra un poco lesionado, ve cómo el equipo avanza sin él. Eso no le impide encontrar el terreno y un puesto de titular en la Europa League en Old Trafford ante el Manchester United (2-2) y luego ante el Villarreal (2-1) antes de volver a lesionarse.
Muy feliz en Sevilla, el aspirante a internacional francés (jugó su primer partido con la selección francesa el pasado mes de septiembre ante Bélgica) y no tiene ganas de marcharse.
Pero la antigua gran esperanza del PSG sigue teniendo muy buena valoración en el mercado de fichajes. Según «footmercato.fr», varios clubes de la Premier League y dos clubes franceses en la parte superior de la tabla de la Ligue 1 aprecian especialmente el perfil del jugador y recientemente se han puesto en contacto con el entorno del jugador para tomar la temperatura.
No hay seguridad de que esto sea suficiente para convencer tanto al jugador como al club español que aún compite en la Europa League.
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