El Toulouse, necesitó de dos penales para finalmente anotar y vencer a un Nîmes (1-0) que ha dejado gratas impresiones en el arranque de la Ligue 1.
“Les Violets”, inicialmente comenzaron el partido siendo los claros dominadores. A los 8 minutos de la primera parte, Aaron Leya Iseka, anotaría un gol que fue anulado por el VAR. Posteriormente llegaría el primer penal fallado de la noche, gracias a una buena actuación bajo los tres palos de Paul Bernardoni, luego ganarle el duelo a Max-Alain Gradel.
Ya en el segundo tiempo, el capitán del Nîmes Anthony Briançon, concedería el segundo penalti de la noche, pero esta vez el marfileño Gradel, no fallaría en convertir engañando a Bernardoni al palo apuesto de su tiro cuando se pisaba el (78 min).
Esta derrota para el Nîmes, significó un corte de racha exitosa de victorias desde la apertura del campeonato.
Fuente: futbolfrances.com
