Las sanciones pronunciadas por el comité disciplinario este miércoles por la noche en relación con los incidentes ocurridos durante el compromiso “Nice-OM” están provocando daños colaterales.
En las últimas horas, el Olympique de Marsella a través de su presidente, Pablo Longoria, ha estigmatizado la falta de indulgencia de la LFP hacia su club. El hombre fuerte de la formación del Marsella cree que sus jugadores fueron víctimas de los incidentes que marcaron el partido del 22 de agosto.
Una observación no necesariamente compartida por la Liga de Fútbol Profesional (LFP). Suspendido por un partido tras haber respondido al lanzamiento de las botellas de la afición del Niza en su contra, Dimitri Payet no digiere su sanción.
Según la información emitida por “RMC Sport”, el centrocampista ofensivo del Marsella no esperaba ser sancionado y no aprecia el planteamiento del comité disciplinario. A pesar del apoyo de la UNFP o de la Ministra de Deportes, Roxana Maracineanu, Payet se encuentra, por tanto, entre los culpables. Afectado, el internacional francés siente cierta injusticia en esta sentencia y se considera más víctima que culpable.
Fuente: futbolfrances.com
